Corona de los viejos son los nietos, Y la honra de los hijos, sus padres. Proverbios 17.6
Base Bíblica: Efesios 5.21-6.4
La presencia de los padres en la vida temprana de los niños es de suma importancia, son ellos los encargados de forjar el carácter del futuro adulto, la palabra del Señor nos manda a instruir el niño en el camino de Dios para cuando sea un adulto no se olvide de las instrucciones de Dios.
Los niños ven en los padres un apoyo y para ellos sus padres son sus héroes, cuando en un matrimonio ocurre una separación es un proceso muy doloroso para los niños, porque es como si rompieran una parte muy importante de ellos, sin embargo, aunque muchos padres no están separados, en ocasiones tienen muchas discusiones en el hogar y hay maltrato físico y verbal principalmente por parte del padre, el niño tiende a sufrirlo y al pensar que es su culpa le hace más daño.
Los padres deben cuidar la mente de sus niños, ellos deben velar por el bien físico, mental y espiritual de estos, pues es su responsabilidad y por ello darán cuenta al Señor. Cuando aun hombre no tiene cuidado de sus niños, estos entienden que no se les ama y siente rechazo por parte de los padres. Un hombre que esta lleno de Dios será un hombre dedicado a su hogar, un hombre que velará por el bien de sus hijos.
Oremos para que el Señor permita que nuestros esposos sean buenos padres, que sean un ejemplo a seguir para nuestros hijos y que sean el ejemplo del tipo de hombre con quienes nuestras hija querrían casarse, oremos para que nuestro esposo entienda el papel de sumo sacerdote que Dios le ha dado como cabeza del hogar. Oremos para que Dios transforme su espíritu, su alma, y su cuerpo y así como el sumo sacerdote era santificado, el también lo sea.
No dejemos de orar por ese hombre de Dios que nos ha tocado como esposo, mas bien seamos pacientes y veamos la salvación de Jehová, pues a su tiempo segaremos, sino desmayamos.
Texto para memorizar:
Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor
Efesios 6.4