Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación. Mateo 5.4
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Es difícil que creer que cuando nos sentimos impotentes al punto de llorar y sin tener consuelo somos unas personas dichosas, sí dichosas. La palabra bienaventurado significa una persona dichosa, feliz, afortunada. Pero ¿realmente es afortunado llorar? cuando lo hacemos delante del Señor sí, es muy afortunado.
En uno de los estudios anteriores hablaba sobre esos momentos tan difíciles en los que nos sentimos ahogar del dolor y la pena, hemos pasado por situaciones tan duras que no nos queda esperanza para seguir luchando, y de la tristeza profunda no que mas que llorar y dejamos que nuestra alma se exprese sacando nuestros sentimiento a través de nuestras lagrimas.
Realmente nadie puede entender lo que sentimos, a veces algunas personas tratan de ayudar pero tenemos las fuerzas para escucharle, por mas que se nos aconseje no entendemos consejo y no que de otra que venir en silencio ante la presencia de Dios y llorar, sí llorar, porque el dará consolación.
Amada hermana, Dios esta esperando que vengas a el para que seas consolada, el ha prometido que recibirás consolación, el no es como las personas que te dicen todo estará bien resiste y todo sigue igual, si Dios te dice que todo estará bien créelo, lo estará. El quiere pasar sus manos en tus hombros, el quiere serte de ayuda en la tempestad.
Cuando recuerdas los momentos en los que tu pareja hiere tus sentimientos y pasan por tu cabeza cada pensamiento de los peores momentos que has pasado en tu matrimonio ven cuéntaselo a Dios, derrama tu corazón delante de su presencia, vacea tus penas y tu dolor delante de Dios, el quiere ser tu fiel amigo.
Uno llora delante de los amigos con la esperanza de encontrar consuelo, el Señor a prometido que sera tu consolador. El sigue esperando por ti, no le llores al diablo y sus demonios porque se ha levantado la guerra en tu hogar, no le llores a tu esposo para ver si eso le hace cambiar, no le llores a tus hijos, no. Llora, desahógate, saca todo el dolor que llevas dentro de ti, pero hazlo delante de la presencia de Dios porque el es tu consuelo en medio de la aflicción.
1 comentario en «Mujer, llora pero delante de Dios.»